Hoy les vengo a contar sobre el almuerzo de tres tiempos que viví hace unos días en Catae Restaurant, ubicado en el Reinasansse Santiago Hotel, y que bajo una atmósfera íntima y acogedora, está desarrollando una interesante propuesta gastronómica basada en cocina internacional con toques chilenos o, mejor descrito por su Chef Ejecutivo, Tomás Navarro, «una gastronomía en base a productos locales con técnicas del mundo».
Además de este sello patrimonial, la cocina, comandada por Navarro junto a Rafael Godoy como Chef de Partida y Constanza Jamis en la pastelería, tiene especial foco en trabajar de forma sustentable – Reinassance Santiago es el primer hotel en Chile con certificación LEED GOLD, que lo transforma en un lugar eficiente y responsable, para trabajar y vivir, siempre preocupados del cuidado del planeta – elaborando preparaciones en base a productos endémicos los que son adquiridos de forma responsable.

Para iniciar este viaje de sabores, su bartender, Pablo Pizarro, nos deleitó con un cocktail inspirado en Nina Simone y que es un homenaje al Negroni con ciertas variaciones que incluyeron: Gin, licor de maracuyá francés, Vermouth Rosso y Bitter de Duranzo, una combinación muy seductora, si bien tenía un excelente sabor, lo que más destaco es el impresionante aroma al durazno que lo hacía muy singular.
En el primer tiempo, se nos presentó Quinoa de colores, huevo de campo sous vice, hilos de papas nativas y trufas maridado con un Vino Calcú, Gran Reserva, Rosé-Malbec– 2020 del Valle de Colchagua, un plato de la carta vegetariana, que será parte importante de hoy en más, según el chef Tomás Navarro, entendiendo que muchos consumidores están tomando mayor conciencia de los productos que comen y cada vez hay una mayor demanda de platos veggies o veganos.
Esta preparación es agradable, liviana, ideal para esta temporada. El huevo estaba en su punto con una yema cremosa que hacía un perfecto match con las papas hilo. Por otra parte, el aderezo era correcto, armonioso, se sentía pero no invadía el paladar.

El segundo tiempo fue un Esturión con su caviar, acompañado de espárragos fritos, hongos, frutillas encurtidas y salsa holandesa. Su maridaje fue un espumante Gemma, Valle del Elqui, Brut. Esta preparación está inspirada en la Patagonia, posee grasas saludables y tiene una textura muy similar al lomo vetado. Y la guarnición no deja de ser sorprendente donde destaco la salsa holandesa que estaba realmente sabrosa…la disfruté muchísimo!


Para terminar esta trilogía de sabores disfrutamos un Garrón de Cordero Magallánico con puré de porotos pallares, maní, semillas de mostaza y cebollitas perlas maridado con un Miguel Torres Cordillera, Reserva Especial, Carmenere, 2016. Esta preparación es fascinante, el cordero fue cocinado por 6 horas y, literalmente, lo comías simplemente con un tenedor. La carne estaba tierna, sabrosa y abundante. Por otra parte, el puré fue fascinante con el toque de maní que se sentía al disfrutarlo.

Por último, tuvimos presentación de una gama de postres, todos perfectos y deliciosos..realmente un broche de oro para cerrar este almuerzo de tres pasos, esto incluyó Cheesecake de frutos rojos y naranja, Tarta de chocolate, miel tostada, naranja y Frangelico.

En el caso que quieras disfrutar de la tremenda experiencia gastronómica que ofrece Catae Restaurant, no olvides realizar tu reserva en: catae.reservas@rsantiagohotel.com.